Oreja de soplador, soldadito, barbie, Fulgencio, palomita, Estefana, oso, chata, orejas paradas, jarocha, luna, negra, pecho blanco, machín, botijas, galleta, gaviota, mariposa, plumita, loba, trompa larga y carita pinta son los nombres de algunos de los 200 perros que se encuentran al interior del Refugio de Perros de la “Tía Migue”.
Desde hace 16 años, Miguelina García Méndez, “Tía Migue”, ha sostenido un humilde pero amoroso hogar para perros en condición de calle. Su propia experiencia, al ser huérfana desde muy pequeña, le ha permitido empatizar con los animales que son abandonados a su suerte.
“Yo vivía cerca de un arroyo y veía como se deshacían de ellos. Los iban a dejar en canastos o carretas llevaban a los perros y los dejaban amarrados, incluso a sabiendas que podrían morir ahogados si subía el agua en temporada de lluvia”, dijo en entrevista.
De acuerdo al INEGI, México cuenta con el mayor número de perros callejeros, ocupando el deshonroso primer lugar en América Latina. Las perreras están desbordadas y las autoridades no han encontrado la fórmula para erradicar el abandono que sufre el 70 por ciento de los 27 millones de gatos y perros que hay en el país.
Miguelina no pudo ser indolente a esa situación, comenzó a rescatarlos y alimentarlos de a poco. Al inicio solo eran 5, sin embargo, la falta de sensibilidad de las personas a quienes se les hace muy fácil abandonar a sus mascotas, hizo que rápidamente la cifra creciera a 30, 80, 105 y hoy en día son más de 200 perros a los que le da un humilde hogar, alimento y mucho amor.
“Es muy triste la vida de los perros cuando sus dueños los abandonan, los animalitos en la calle sufren por calor y falta de agua. Me da mucha tristeza, por eso espero que antes de irme de este mundo y con ayuda de Dios pueda sacar a muchos perritos en adopción”, refirió esperanzada.
A lo largo de estos años, “Tía Migue” calcula que ha cuidado a más de 500 perros y aunque el municipio de la Villa de Zaachila le prestó un terreno, hoy habilitado como albergue, éste ya no cuenta con la capacidad para recibir a más perros, además su desgastada salud no le permite seguir realizando todo el trabajo de limpieza y cuidados que necesitan para una vida digna.
Y es que «Tía Migue» no tiene familia, su pareja don Félix Coronel Martínez, falleció en junio del 2020 en medio de la contingencia sanitaria por el coronavirus; así mismo su hija Laura Sánchez García quien falleció en Estados Unidos al inicio de la pandemia.
Además, padece del corazón y la diabetes merma cada día su salud. Incluso refiere tener piedras en la vesícula, sin embargo, se rehúsa a entrar al quirófano porque no tendría con quien dejar a sus perritos, por ello agradece en todo momento a todas las personas, incluidas las autoridades municipales, que la apoyan con todo los necesario para mantener la titánica tarea.
“Me siento feliz, son más de 16 años de vivir con mi familia, porque ellos son mi familia. Yo le doy las gracias porque no me han abandonado con mis perritos y me están ayudando a salir adelante. Gracias a ustedes los perros no se quedan sin comer como antes, al igual que yo”, indicó.
En este mismo sentido, recordó que no hay dinero que alcance para sostener el refugio, por lo que pide la colaboración de más personas para dotar de agua y alimento a los perros, donar dinero para la atención veterinaria, así como la compra de medicinas como insulina para su desgastada salud.
Asimismo, hizo un sentido llamado a la población en general para dejar atrás el abandono de perros, para tocarse el corazón antes de hacerlo y recordar que se trata de seres que sienten.
“Si ya decidieron tener una mascota en su casa, no la abandonen porque ellos sufren cuando los echan a la calle. Yo les pido no más abandono, ellos también sienten el desprecio de sus dueños”, manifestó.
Por una cultura de la adopción
Andrea Aguilar es una joven entusiasta que, desde hace año y medio, se ha convertido en voluntaria del refugio por convicción, ella junto con otras mujeres han implementado un protocolo de adopción que incluye un sencillo formulario que se envía por internet y donde preguntan a las personas postulantes las condiciones de vivienda, si pueden hacerse cargo de uno o más perros, incluso que opinan de la esterilización, a fin de tener una primera valoración.
Posteriormente, las invitan al refugio para que conozcan a los perritos y finalmente se rellena la solicitud que incluye el compromiso de adopción responsable; además le dan seguimiento el estado en el que se encuentran los animales para corroborar que se encuentren en condiciones dignas.
En año y medio, han dado en adopción a 40 perritos, lo cual es insuficiente para la cantidad de animales al interior del refugio, esto se debe a la falta de cultura de adopción y la deficiente información de la población con respecto a la compra-venta de animales y la esterilización.
“El refugio no es el mejor lugar del mundo, pero tratamos que los animales tengan por lo menos un hogar. Es necesario que la población entienda la importancia de la esterilización para reducir la población de perros en situación de calle, fomenten la adopción y dejen de comprar ejemplares de algunas razas en específico”.
Para Andrea, hace falta que la problemática sea atendida con políticas públicas y programas específicos, que incluya la concientización de la población, campañas de esterilización y sanciones para las personas que, con todo lo anterior, sigan abandonando a sus mascotas.
El voluntariado también incluye a Cheli Aguilar, Itzel Viazcán, Montserrat Pérez y Cristián Gómez quienes todos los fines de semana trabajan arduamente para mantener en condiciones dignas el refugio de la “Tía Migue”.
En apoyo de “Tía Migue”, se une fundación Tercera Llamada
Hace seis meses, la fundación Tercera Llamada Oaxaca A.C. se unió a las labores al interior del refugio lo cual ha permitido la atención médica de los perros y la obtención de alimento, así como la compra de medicamento para atender la salud de Tía Migue.
Encabezada por la ingeniera Gabriela Cueto, la fundación, se ha convertido en una gran aliada de los cientos de perros que hace unos días recibieron tratamiento para combatir los parásitos y la sarna de manos de médicos veterinarios de la UNAM y la UBC que forman parte de la fundación “Piroloco por un mundo mejor”.
Así mismo se han dado a la tarea de hacer alianzas con artistas de diversas disciplinas que donan lo recaudado por la venta de sus obras para apoyar a “Tía Migue”, tal es el caso de la exposición al interior de la Galería Zenit, ubicada en la calle de Crespo 627, en el Centro Histórico de Oaxaca.
También organizan el croquetón, el último domingo de cada mes en la capital oaxaqueña y dentro de sus próximas actividades se encuentra un evento público para generar la adopción de perros del refugio de la “Tía Migue”.
“Lo que quieran dar siempre es bienvenido, ya sea en efectivo o en especie, lo importante es que nos apoyen para seguir dando atención en los municipios de Oaxaca de Juárez, Villa de Zaachila y Asunción Nochixtlán”, indicó Gabriela Cueto.
Además de juntar el dinero suficiente para poner piso de concreto en el refugio y evitar así problemas de sarna, por lo que invitaron a la población en general a contribuir con la fundación y el refugio de perros, ya sea con dinero o en especie con alimento, medicamentos y otros productos.